A partir de mi experiencia en este ámbito de terapia, he identificado dos funciones que en conjunto llevan a los adultos a consultar:
1. La constitución como sujeto y persona en el mundo. Esto tiene que ver con necesidades y motivos personales de identidad, estructura, confirmación y determinación:
2. Un medio de transformación y síntesis. Esto tiene que ver con necesidades y motivos de profundización,
generación de sentido y transformación:
Estos y otros motivos son dispuestos en el espacio terapéutico por los asistentes a consulta, donde a través de la conversación como experiencia reveladora y reparadora, así como de otros medios de expresión y asimilación psicológica, se acompaña y orienta en procesos de aceptación, maduración y cambio.